El virus A/H1N1 ha sacado a la luz, la miseria, pobreza y desigualdad, en las que sobreviven decenas de millones de mexican@s y ha hecho evidente la ambición, inacapacidad, autoritarismo, irresponsabilidad, corrupción, ineptitud, pereza y cinismo imperantes hoy día en México.
L@s mexican@s hemos sido "shokeados", para hacer creer al mundo que aquí, se aplicaban desde "endenantes", no sólo las medidas necesarias, sino todas las exageraciones que el cuerpo aguante, para controlar a la entonces conocida como “Swine Flu”.
Es ahora evidente, para el mundo, que en México no hay condiciones sanitarias, ni respeto a los derechos humanos y constitucionales para la mayoría de la población y que los servicios públicos de salud están a punto de colapsarse.
¿Por qué si las lamentables muertes causadas por la ya no porcina influenza, son un número mucho menor a las causadas por otras influenzas, (29 en el mundo) y su peligrosidad bajó de megaarchirrecontra, a mediana; en los últimos dias no hemos tenido víctimas mortales que lamentar y todos los casos se detectan y atienden; tenemos 2 millones de dosis del medicamento indicado para su tratamiento (en todo el mundo, afortunadamente no suman 2 mil las personas infectadas en el planeta) y las autoridades afirman tener todo bajo control; insisten en ultradimensionar la amenaza de la ahora
llamada “Influenza Mexicana” y borran a muchas víctimas mortales de males respiratorios (sin contar las ocasionadas por otras enfermedades curables y las de desnutrición , que suman mas de 100 diarias) y desatienden a enfermos de otros males más dañinos? ¿Por qué insisten en combatir al “nuevo y mutante” virus con "Armas Químicas" no especificadas que serán esparcidas en oficinas, transporte público escuelas y centros de reunión? La foto mostraba a hombres fuertemente equipados blandiendo tremendas pistolas soltando gases sobre fotógrafos y viandantes. Esta imagen en lugar de tranquilizar, aterroriza.
Esta acción, dijo el Jefe de Gobierno, costará 120 millones de pesos…¿quién autorizó que esta suma sea erogada para este fin, qué lo justifica, de qué partida sale, quiénes aplicarán estas sustancias, qué experiencia tienen, quién licitó el contrato y cuándo?¿Dónde estaba la Asamblea Legislativa cuándo esta importante decisión fue tomada?
El uso del cloro, desinfectantes, bactericidas y antivirales tiene que ser riguroso y estrictamente controlado y los 2 últimos, bajo prescripción médica individualizada. El mal uso y abuso de estos productos tiene consecuencias nefastas para la salud, destruye las defensas, altera y debilita el sistema inmunológico de personas sanas y enfermas.
Tenemos derecho a ser informados con precisión, ¿qué sustancia(s) química(s) están aplicando?, ¿en qué dosis? y ¿cuáles son sus consecuencias y contraindicaciones?. ¿Será que no miden que puede ser peor el “remedio que la enfermedad”?
El pánico no es buen consejero y las acciones tomadas bajo sus efectos, no dudamos bien intencionadas, pero sin respeto a derechos individuales y colectivos y además carentes de logística, pueden derivar es situaciones más complicadas aún, que la presente, aunque ésto ahora nos parezca imposible Duele, que en esta extraña y grave situación, la generosidad, solidaridad y el apoyo voluntario, característico del pueblo mexicano, no se haya podido manifestar: si no todo lo contrario, nos sentimos aislados paralizados, desconfiados, enfermos y enojados, hasta con el compañero de viaje porque tosió y tememos nos pegue “la roña “.
Ofelia Medina
